¿Cómo establecer modelos de negocio bancarios resilientes?
Business Review (Núm. 229) · Finanzas · Diciembre 2013
El inicio de la crisis económica global y de liquidez suele fecharse en varios eventos, que incluyen la suspensión por parte de BNP Paribas de la retirada de fondos en tres de sus hedge funds en 2007, la crisis de las hipotecas subprime de EE. UU., el estallido de la burbuja inmobiliaria de
EE. UU., la caída en picado de los valores de los títulos vinculados a precios bienes raíces en EE. UU. y el deterioro global de las instituciones financieras a nivel mundial. Las razones de la crisis fueron múltiples: el exceso de apalancamiento financiero (incluyendo el uso de vehículos financieros no contemplados en los balances), adquisiciones poco meditadas, diversificación basada en sinergias dudosas, sistemas de gestión de riesgos y de gobierno corporativo fallidos, así como problemas de coordinación vertical y horizontal en toda la red de valor de la banca, en su sentido más extenso. Los efectos secundarios económicos desataron un efecto cascada a nivel mundial, teniendo como impacto la crisis europea de la deuda soberana, lo que creó altos niveles de endeudamiento de los hogares, desequilibrios comerciales y un desempleo récord, por lo que tuvieron que imponerse severas medidas de austeridad. Desde el inicio de la crisis en la industria financiera, muchos bancos han llegado a perder más del 90% del precio de sus acciones, otros muchos han ido a la bancarrota, y de los que sobrevivieron, bastantes aún tienen que recuperarse por completo.
La crisis financiera mundial de 2007-2008 muestra no solo las dificultades técnicas de modelización de riesgos, sino que también plantea la duda de si tales riesgos pueden ser, de manera inherente, no modelables. Parece que las normas de comercio y gestión guiadas por objetivos de rentabilidad a corto plazo han conducido a un desarrollo cada vez más complejo, opaco y difícil de evaluar de los sistemas financieros y los instrumentos bancarios.
El problema de la medición del riesgo se convirtió en un problema de mala gestión del riesgo.
La velocidad con la que el comercio de "activos tóxicos" condujo el mercado de préstamos interbancarios a un punto muerto revela la insuficiencia de la volatilidad ex post como sustituta de la volatilidad ex ante, y también pone de manifiesto una verdad fundamental: si cambian las condiciones, el futuro es a menudo diferente del pasado. Además, si las fuentes y características de riesgo son idiosincráticas, y no pueden ser reducidas fácilmente, o ...