En la actualidad, los fabricantes tienen la posibilidad de dotar a sus productos de nuevas y poderosas capacidades gracias a la hiperconectividad que permite el llamado “Internet de las Cosas”, o IoT, por sus siglas en inglés. Si una organización desea satisfacer los nuevos retos impuestos por esas transformaciones, debe asumir el desafío. Uno de ellos, sin duda, es el referente al diseño. Los diseñadores han de seguir creando objetos útiles, pero sabiendo adaptarles la complejidad añadida de esta nueva tecnología, con la finalidad de aportarles un nuevo valor. En la medida en que las compañías se centran en prepararse a sí mismas para desarrollar objetos facilitados por el IoT, ¿qué deben tener en cuenta también a la hora de diseñar exitosamente productos “conectados”?
Un nuevo desafío para el márketing: crear diseños "conectados"
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Alberto De Torres Pachón
Márketing y Ventas (Núm. 142) · Márketing · Marzo 2017
Management & Innovation (Núm. 11) · Márketing · Enero 2019
La inteligencia de la que se está dotando a las cosas que nos rodean está transformando no solo los productos en "servicios inteligentes", sino también la cadena de valor, que, de su forma lineal tradicional, evoluciona hacia un ecosistema formado por complejas alianzas entre empresas, clientes y personas. Esta "desintermediación" de los canales de distribución y el hecho de poder conectar directamente con los clientes supone para las empresas un conocimiento más profundo de los consumidores y contribuye a aumentar su fidelidad, pero también aporta a las organizaciones ingresos recurrentes más frecuentes. Realmente, el Internet de las Cosas (IoT) permite transformar "compañías de producto" en "compañías de producto as a service". Ante este nuevo paradigma, solamente aquellas compañías que tengan la capacidad de transformar sus sistemas, procesos y cultura para desarrollar nuevos modelos de negocio colaborativos y diseñar de forma agresiva nuevas tecnologías de productos conectados podrán ser ganadoras en la próxima década. Y en este contexto surge una duda importante: ¿qué retos presenta esta tecnología a la hora de pensar y diseñar un producto o servicio?
EL SIGNIFICADO DE UN PRODUCTO CONECTADO
Para diseñar un producto conectado y, por ende, inteligente es necesario integrar diferentes equipos, procesos multidisciplinares y nuevos métodos. Las organizaciones tienen que ser conscientes de que su estrategia tradicional, así como los métodos que han estado usando hasta ahora para el desarrollo de sus productos, es totalmente distinta a la que demanda un negocio plenamente "conectado". La tecnología del IoT ofrece casi infinitas posibilidades, siendo su principal objetivo conectar a clientes y empresas de formas inimaginables hasta el momento; y permite que los objetos "hablen" unos con otros continuamente, formando sistemas enormes, interconectados, capaces de crear, analizar, agregar o actuar sobre los datos. Los nuevos productos inteligentes necesitan incorporar la tecnología del IoT desde el comienzo. Así, el diseño sirve no solo para generar productos inteligentes, sino también para crear un sistema efectivo conectado. Para ello, es indiscutible que cualquier producto desarrollado para este fin debe cumplir con unos requisitos fundamentales desde el momento mismo de su concepción. Ha de:
Alberto De Torres Pachón
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CEO de Nektiu y coordinador de los Programas Superiores de Inteligencia Artificial e Internet de las Cosas e Industria 4.0 en ESIC Business & Marketing School.