El día después de una "joint-venture"
JP
J. Peter Killing
Business Review (Núm. 86) · Estrategia · Agosto 1998
No todo el mundo puede dirigir una joint-venture. Si no le gusta la idea de nombrar director general de la joint-venture a alguien que no es de su confianza, ni acepta conceder libertad al director para tomar las decisiones como lo considere oportuno y, definitivamente, preferiría hacer uso del poder que le confiere la posesión de la mayoría de las acciones de la empresa, piense detenidamente si quiere formar una empresa conjunta en la que necesita la cooperación y compromiso constante de su socio. Para muchas empresas es difícil, incluso imposible.
Autor: J. Peter Killing