Los desafíos contemporáneos en el diseño de cadenas de suministro sostenibles

Una revisión de las publicaciones recientes y actuales en el campo del diseño de redes de cadenas de suministro y, en concreto, de la planificación de la gestión de instalaciones pone de manifiesto la existencia de un importante corpus de trabajos publicados, especialmente en lo referente a la modelización matemática de las redes, pero también la existencia de ciertas lagunas en el contenido que abarcan estas publicaciones. En particular, destaca su énfasis en el diseño de redes de nueva construcción, en vez de ocuparse de la necesidad de rediseñar las redes ya existentes, algo que, posiblemente, es más típico.

Esta revisión también identifica cinco tendencias o cuestiones distintas, pero profundamente conectadas (la sostenibilidad, las economías circulares, la obtención de datos, las disrupciones y la resiliencia y el comercio minorista omnicanal), que tienen implicaciones significativas a la hora de planificar la ubicación de instalaciones y que, si se investigaran en mayor profundidad, sin duda aportarían beneficios significativos.

 

Una toma de decisiones vital y continua Especialmente en el actual clima económico y político de volatilidad e incertidumbre, el diseño de redes de cadenas de suministro (SCND, por las siglas de supply chain network design) y la adecuada ubicación física de las distintas instalaciones implicadas tienen una importancia crítica y continuada. Aunque, tal vez, “rediseño” sería un término más apropiado, ya que es relativamente raro que una empresa pueda permitirse el lujo de diseñar una red de cadenas de suministro partiendo de cero. En cualquier caso, la planificación y optimización de la ubicación física de las distintas instalaciones implicadas en la cadena de suministro es una tarea vital y continua, más aún dado el complejo conjunto de interdependencias entre la situación de las instalaciones y muchos otros aspectos de la planificación y funcionamiento de las cadenas de suministro.

Físicamente, una cadena de suministro comprende una red de instalaciones empleadas en última instancia para satisfacer la demanda de los clientes de forma eficiente y eficaz. Estas instalaciones van desde las fábricas y almacenes de los proveedores, pasando por las plantas de producción, transformación y montaje, hasta los centros de distribución y establecimientos comerciales.

Entre las principales decisiones a la hora de diseñar estas redes figuran:

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