Pensamiento híbrido: el futuro de las organizaciones innovadoras

Pensamiento híbrido: el futuro de las organizaciones innovadoras Pensamiento híbrido: el futuro de las organizaciones innovadoras
Business Review (Núm. 218) · Recursos humanos
Business & Technology (Núm. 40) · Recursos humanos

El éxito de las organizaciones innovadoras del siglo XXI dependerá de su capacidad para desarrollar el pensamiento híbrido en sus equipos.

En el famoso discurso de la ceremonia de graduación de la Universidad de Stanford, Steve Jobs cuenta tres relatos acerca de su vida. "Nada del otro mundo. Simplemente tres relatos". En el tercero habla de la muerte, en el segundo del amor y la pérdida y, en el primero, de "conectar los puntos". Nos cuenta el exdirector ejecutivo de Apple cómo abandonó sus estudios universitarios debido a su alto coste y decidió asistir de oyente a las clases que le parecían interesantes, y a las que seguramente no habría acudido si hubiese continuado con sus estudios. Una de esas clases era Caligrafía, que no parecía tener mucha utilidad en su momento. Asistió a esa clase porque "era hermoso, histórico, artísticamente sutil de un modo que la ciencia no puede captar, y lo consideraba fascinante". Ninguna de las asignaturas optativas que cursó Steve Jobs en el Reed College tenía aplicación práctica y, sin embargo, diez años más tarde, utilizó todos esos conocimientos en el proceso de diseño del primer ordenador Macintosh. Esos conocimientos de caligrafía hicieron que el Mac tuviera tipos de letras múltiples y fuera el primer ordenador en contar con una caligrafía bella. Su influencia fue grande en los otros fabricantes, así como en la humanización de los ordenadores personales.

La mezcla de conocimientos aparentemente no relacionados es la generadora del pensamiento híbrido y, como tantas cosas, nace hace unos 2.500 años. En los siglos v y iv antes de Cristo, en la isla de Samos y en el resto de las colonias griegas del transitadísimo mar Egeo, surge una nueva forma de pensamiento que reflexiona y explica el mundo de una manera totalmente diferente. Dicho pensamiento sostiene que el mundo y todo lo que existe se compone de átomos, que los animales son evoluciones de formas más simples, que las enfermedades no son causadas por demonios o dioses, que la Tierra solo es un planeta más que gira en torno a una estrella muy lejana. Nació entonces el concepto de cosmos, en oposición al de caos, es decir, la idea de que el universo es cognoscible y, por tanto, analizable. La observación del cosmos permite deducir la existencia de un cierto orden en la naturaleza, de unas leyes que explican el funcionamiento del universo. ¿Por qué surgen estas ideas tan avanzadas precisamente entonces?

Desde luego, no es una casualidad. El mar Egeo era el centro de antiguos imperios, siempre cerrados a formas nuevas y prestos a la persecución de todo aquel que tuviera ideas d...


Jon Elejabeitia

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Arquitecto y director de I+D+i del Instituto Hune.

Sebastián Cavanagh

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Licenciado en Bellas Artes y Administración de Empresas. Vicepresidente global y director general para España de Nurun Inc.