Liderando hoy

Seguro que, sin esforzaros, os vienen a la cabeza situaciones muy recientes que han desestabilizado vuestro entorno y, por tanto, el de vuestras empresas: la COVID-19, problemas en la cadena de suministro, encarecimiento de materias primas y de la energía… En definitiva, ahora vivimos en un mundo más globalizado que en el que vivían nuestros padres, con avances tecnológicos vertiginosos que impactan directamente en cambios sociales y culturales, y hacen que las personas y las organizaciones tengamos que ser más flexibles para sobrevivir y prosperar.

En ese sentido, ¿cómo debería ser un líder hoy?

1. Resiliente. Levántate cada mañana con la ilusión de aprender algo nuevo, asumiendo la incertidumbre que te rodea con humildad, dejando “el ego en el banquillo”, sin permitirte perder el foco de lo importante.

2. Jugador de equipo. Celebra los logros de tu equipo y poténcialos; no intentes capitalizarlos para tu beneficio personal.

3. Piensa a largo plazo. Aunque el largo plazo no exceda los tres años, no debemos perder la perspectiva, y que los pasos de hoy estén alineados con lo que queremos ser mañana.

4. Comunicación efectiva. Asegurarnos de que el otro entiende lo que queremos transmitirle parece evidente. Os aseguro que es un reto en sí mismo.

5. Desarrolla el talento. Rara vez el fracaso de una compañía viene derivado de la falta de conocimiento técnico, y en numerosas ocasiones me encuentro directivos miopes que se rodean de gente que no les cuestiona y les adula. Rodéate de gente mejor que tú y crece haciendo crecer a tu equipo; esto es diferencial.

6. Comportamiento y valores.  Nuestro comportamiento y los valores que transmitimos con nuestros actos toman especial relevancia, y no debemos perder de vista las implicaciones éticas y sociales de los mismos a largo plazo.

7. Ponte en la piel del otro. Este entorno genera vaivenes emocionales en nuestros equipos, y nos tienen que ver como un apoyo. Escucha a tu equipo activamente y ayúdale, desde la humildad, la cercanía y el apoyo incondicional, a superar los desafíos.

Los líderes nos enfrentamos a los desafíos de un entorno caracterizado por la incertidumbre y el cambio constante. Por ello, hemos de adaptarnos a la mayor velocidad posible, para así poder servir mejor a la sociedad a la que pertenecemos.