El mayor impacto de las tecnologías inteligentes no será la eliminación de los puestos de trabajo, sino la transformación de lo que hacen las personas y una integración más profunda de la innovación en las empresas.
Personas y máquinas: socios en innovación
Business Review (Núm. 298) · TIC · Marzo 2020
La adopción prudente de las tecnologías inteligentes será esencial para la supervivencia de muchas empresas. Pero no bastará con, simplemente, implementar las últimas tecnologías y herramientas de automatización.
El éxito dependerá de si las organizaciones las usan para innovar en sus operaciones y en sus productos y servicios, y si adquieren y desarrollan el capital humano para hacerlo.
En una encuesta reciente de Deloitte a 250 ejecutivos familiarizados con la forma en que sus empresas piensan sobre las tecnologías inteligentes, casi tres de cada cuatro dijeron que esperaban que la IA transformara sustancialmente sus organizaciones en los próximos tres años (1). Por supuesto, el personal se verá profundamente afectado por todos estos cambios. Sin embargo, a pesar de que la IA eliminará (con casi total seguridad) algunos empleos en la próxima década, puede crear tantos puestos como destruya y abrir nuevas y vastas oportunidades para la colaboración entre humanos y máquinas. Los antiguos rumores sobre la pérdida de empleo a gran escala (2) se han acallado un poco. En la encuesta de Deloitte, por ejemplo, reducir el número de empleados a través de la automatización quedó como el último objetivo de la IA en la clasificación; solo el 7% de los encuestados lo seleccionó como su primera prioridad. De hecho, muchos observadores están cambiando sus expectativas, pasando de la pérdida de empleo al cambio de empleo, a medida que los humanos descubren maneras de trabajar en estrecha colaboración con las máquinas.
Dada la probabilidad de que muchos empleos cambien, en lugar de desaparecer, las organizaciones deben comprender las nuevas competencias requeridas. En una reciente encuesta de McKinsey a ejecutivos de empresas con ingresos de más de cien millones de dólares, el 66% de los encuestados dijo que “abordar las posibles lagunas de competencias relacionadas con la automatización/digitalización” en su personal se encontraba entre sus “10 primeras prioridades”; el 64% de los encuestados de EE. UU. y el 70% de los europeos dijeron que necesitaban volver a formar o sustituir, al menos, a una cuarta parte de su actual plantilla (3). Significativamente, solo el 16% de los líderes empresariales respondieron que estaban “muy preparados” para abordar posibles lagunas de competencias, lo que plantea serios interrogantes acerca de lo preparados que están para competir. Otras encuestas recientes sugieren que las altas expectativas que tienen ...
Senén Barro
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Director científico del Centro Singular de Investigación en Tecnologías Inteligentes de la Universidad de Santiago de Compostela (Galicia, España) y profesor invitado en Babson College (Wellesley, Massachusetts)
Thomas H. Davenport
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President’s Distinguished Professor of Information Technology and Management en el Babson College, profesor visitante en la Saïd Business School de Oxford y miembro de la MIT Initiative on the Digital Economy. Coautor de Working With AI: Real Stories of Human-Machine Collaboration (MIT Press, 2022)
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